Este término se refiere a la no asistencia y falta recurrente de los alumnos en etapa obligatoria escolar y a las clases que deben tomarse en su curso, de una forma no justificada. Suele interpretarse como un rechazo del alumno hacia el sistema escolar pero que tiene unas consecuencias inmediatas, a veces no muy llamativas, en función del grado de desarrollo. Este tipo de prácticas ralentizan el aprendizaje y pueden llevar también a la repetición del curso e incluso al fracaso escolar.
En muchos casos es simplemente una muestra de rebeldía por parte de tu hijo menor o adolescente, pero hay que diferenciar entre los casos puntuales de aquellos en el que el absentismo es habitual y reiterado.
Causas del absentismo escolar
Es muy habitual que el adolescente decida dejar de acudir a clase por aburrimiento o bien por sentir que decide sobre su propia vida. Además, un bajo nivel de motivación son las principales causas que llevan a un niño a dejar de acudir a clase.
El entorno familiar o escolar también tienen una importancia en este tipo de comportamientos. El hecho de tener un entorno cercano no favorable es importante a la hora de reducir el interés del adolescente a realizar sus obligaciones diarias. Tener problemas dentro del seno familiar puede hacer que el menor dedique su tiempo a pensar sobre cómo mejorar esta situación o incluso simplemente no acuda a clase para evadirse. El maltrato o abandono del menor tienen la culpa de este fenómeno en muchas situaciones.
En algunos casos es el entorno escolar el que desemboca en un absentismo escolar habitual y reiterado. El hecho de que el menor no se sienta cómodo en su colegio por distintos motivos es el principal motivo en muchos casos. Sufrir bullying o acoso escolar puede llevar al menor a no acudir a clase de forma habitual.
Consecuencias del absentismo escolar reiterado
Cuando este fenómeno se convierte en rutina las consecuencias pueden ser bastante negativas para el menor.
El bajo rendimiento académico puede desembocar en fracaso escolar, empezando por sacar malas notas en un primer momento y posteriormente en un mal comportamiento con los profesores, monitores e incluso con el resto de sus compañeros.
En otros casos este absentismo puede llevar a la adquisición de hábitos poco saludables para el menor como el consumo de drogas o alcohol, con todo lo que conlleva este tipo de problemática, teniendo en cuenta la edad temprana que tiene el menor en estos casos.
Sea cual sea la situación, suele terminar con problemas de adaptación tanto en su futuro personal como laboral, por la falta de costumbre de llevar una vida ordenada y con un sentido de la responsabilidad sin desarrollar.
Cómo detectar el absentismo escolar de un menor y poder frenarlo a tiempo
Existen algunas conductas que pueden hacernos pensar que estamos ante este problema. El cambio de comportamiento repentino, cambio de amistades, de hábitos, son los principales cambios que podemos percibir en el menor.
La experiencia del detective privado, puede resultar de suma importancia, haciendo aflorar aquello que no pueden ver unos padres desde su casa o simplemente desde la mera observación del menor. Como es de esperar, cuando un adolescente esta en una etapa de rebeldía no es fácil sonsacarle información acerca de algunas de las actividades que realiza en sus ratos libres.
Desde Axioma detectives privados Barcelona, nos gustaría poder ayudarte si te encuentras ante una situación difícil con tu hijo o hija. Sabemos la preocupación que un caso así supone para ti. No restes importancia y llámanos sin compromiso.